lunes, 22 de diciembre de 2008

¡Madre mía! The movie

La siguiente crítica ha sido realizada por Odninor, colaborador no oficial.

El autor del blog declara no compartir sus opiniones y no estar de acuerdo con los comentarios del susodicho.

MADRE MIA

La gemela zarapastrosa de la Streep con la amiga muerta, Caracartón, Fondón y Mariposón. El que está sentado es Tolai.

Mamma Mía! es uno de los musicales de mayor éxito de los últimos años. Empleando temas de ABBA como hilo conductor de una trama más bien ligera ha sido estrenado en una docena de países, entre ellos España.

Como ya ha ocurrido en otras ocasiones se ha realizado una película adaptando la obra teatral. Para ello se contrató como directora a la misma persona que realizó el montaje teatral, con un reparto de caras conocidas encabezado por Meryl Streep, esperando repetir el éxito en la gran pantalla… no ha sido así.

¡Madre Mía! The Movie adolece de todos los defectos que una obra de teatro puede tener en su traspaso al celuloide: desaprovechamiento de los escenarios naturales, falta de primeros planos, estatismo, emociones falsas, coreografías limitas y pésimas voces.

La película empieza bien, una imagen onírica acompañada de una de las pocas voces decentes del reparto dan paso a la obertura en la que se nos presenta a los “padres” de la chica, una secuencia dinámica que será la última de toda la película.

La chica es la amiga muerta de Verónica Mars, con algo menos de curvas y ojeras y bastante menos guarrona de lo que la vimos en la bendita serie, para mi lo mejor de la película junto a otra protagonista de la que luego hablaré. Pues bien, esta chica descubre el diario de su madre en el que relata cómo se enrolló con tres individuos prácticamente de manera consecutiva hace veinte años. Dado que la chica tiene esa edad y que según el diario su madre no parece haber vuelto a conocer varón deduce que uno de ellos es su padre. Como se va ha casar dentro de poco se le ocurre invitarlos a todos y así descubrir cuál de ellos es su verdadero padre.

La madre es la gemela zarapastrosa de Meryl Streep, víctima de su peluquero y de los de vestuario que además ha invitado a la boda a sus dos mejores amigas: la estupenda Christine Baransky y Lina Morgan.

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Maravillosa Baransky y Lina Morgan secundan a Pelosucio Streep.

Los tres padres llegan a la isla… porque la historia transcurre en una isla griega. Esto lo sabemos porque hay mar, una montaña y, sobre todo, muchas mujeres feas y peludas con barba de tres días.

Los tres sujetos son Caracartón Brosnan, Fondón Skarsgard y Mariposón Firth cuyas dotes como cantantes van de horrible a patético. Caracartón no lo haría del todo mal si al menos llevara una barba sucia, una botella de Whiskey en la mano y moviera los dedos de manera rara mientras se tambalea como hace Joe Cocker, pero malgasta su talento intentando cantar bien cuando se ve a la legua que lo suyo son los Martini sacudidos y los anuncios de cremas faciales masculinas que debe gastar por arrobas con ese careto requemado.

Hay muchas canciones de ABBA lo cual está muy bien… si te gusta ABBA. Y todos los momentos musicales consisten en montar un numerito en la calle mientras un grupo de griegas se suma al desfile que invariablemente termina en el embarcadero y con alguien cayendo al agua. La primera vez hace gracia pero a la décima aburre.

También hay un número en el que las amigas de Desmaquillada Streep intentan animarla en el que destaca Lina Morgan haciendo su numerito de Tonta del Bote, las dos tan feas y desafinadas que dan grima. Menos mal que está Estupenda Baransky para subir el nivel con su belleza, clase y estupenda voz. Ya me gustó en la serie Cybill y dió muestras de su talento para el musical en Chicago pero en ¡Madre Mía! The Movie se supera a sí misma. El único personaje con gracia de toda la película y, junto a la amiga muerta de Verónica Mars, la única con una voz digna de un musical.

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De mayor quiero una mamá como tú.

También sale Tolai Cooper como el prometido en un papel totalmente irrelevante entre tanta arruga y michelín. Junto a su grupito de descerebrados musculitos protagoniza uno de los momentos más vergonzosos de la película en un número musical en el que la pandilla de seguidores del método Atlas se pasea por (¡sorpresa!) el embarcadero con aletas de bucear haciendo poses ridículas. Todo un homenaje al nonsense.

Lo peor de la película es el falso buen rollo que pretender transmitir los protagonistas que resulta forzado y poco real. Unos actores a los que sobran años, kilos y arrugas y una puesta en escena que en las tablas puede resultar simpática pero en la pantalla queda aburrida y repetitiva.

Y cuando el suplicio parece haber acabado todavía queda el apoteosis final, con un video-clip en los créditos en el que los protagonistas interpretan un último tema con la peor caspa setentera que pueden soportar mis sufridos ojos.

¡El horror, el horror!

Para un perfecto visionado de la película es recomendable el uso del siguiente kit.

Las gafas pueden elegirse entre roble y pino.

gafas madera taponesoidos2

lunes, 8 de diciembre de 2008

Otro año sin Expofriki

Este año no he ido a Expocómic,ni el pasado... ni el anterior.
Y es que Expocómic no me convence.
No todo es achacable al evento, la mayoría de mis pegas son más bien personales:

1º No me gusta pagar la entrada.
Vale que hay exposiciones, eventos, charlas y firmas de autores. Pero al final lo que uno hace más es comprar. Y me fastidia tener que pagar para entrar a comprar en un sitio. Es como tener que pagar entrada por entrar al Carrefour alegando que "hay degustaciones de comidas".


2º Demasiada gente para tan poco espacio.
El recinto de la Casa de Campo se ha quedado pequeño, cada año la afluencia es mayor y también aumenta el número de editoriales con su correspondiente stand. Codazos, colas, gente sentada en todas partes, calor humano...

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La plaza estaba abarrotá.


3º Las exposiciones siempre me decepcionan.
Da igual que sea Steve Rude y sus cuadros de ancianas gordas o una mini-exposición sobre el Capitán Trueno. Las exposiciones están poco o mal presentadas, recurren alarmantemente a la fotocopia y dan un aspecto excesivamente desangelado.


4º Demasiados otakus.
Seguro que a más de uno le sienta mal esto que digo, pero a mi tanto friki disfrazado de personaje de anime me da un poco de vergüenza ajena. Entiendo que es una de las pocas ocasiones en las que pueden lucirse así sin despertar la risa del personal, pero creo que ya existe un Salón del Manga, con mayor éxito incluso que este Expocómic, donde creo que encajan más que en un evento más generalista sobre los tebeos.

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Friki’s Power.


5º No me gusta ir solo.
Creo que un salón de estas características se disfruta más en compañía de otros aficionados, desgraciadamente no conozco a mucha gente que comparta mi afición y cuando voy con mi mujer tengo la sensación de que se aburre. Recomiendo ir con amigos que compartan el gusto por las viñetas.


6ºLa organización
Charlas con autores en oscuras salas imposibles de encontrar sin hacer uso del hilo de Ariadna. Megafonía estridente e incesante que impide oír a los ponentes. Traductores poco atinados. Cosplay a todo volumen. Largas colas de entrada. Asfixia y lipotimias entre el público.

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Las clases magistrales suelen tener mucho éxito. No entiendo porqué.


7º La ubicación.
Demasiado en la periferia de Madrid, no demasiado bien comunicado y lejos de cualquier buen restaurante.

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No preguntes.


Siempre que asisto a un Expocómic tengo una sensación agridulce. He disfrutado con las charlas de Busiek y Chen, con la de Starlin, con un maravilloso Hernández Palacios en la Expogafe (murió a los pocos meses y el Palacio de los Deportes donde se celebró ardió también poco después), con la última presentación de novedades de Pere Olivé... pero otras veces me he ido sin ver ningún acto y, encima, con los bolsillos vacios.
Creo que Expocómic ha crecido y mejorado año a año pero hasta que no encuentre un recinto adecuado y obtenga entidad propia desligándose del manga y los videojuegos, no podrá dar todo lo que puede ofrecer.


Tal vez el próximo año.

viernes, 28 de noviembre de 2008

Arrugas en la memoria

La estupenda portada expresa a la perfección el sentido del cómic

“Arrugas”, del Valenciano Paco Roca, premio al mejor guión y a la mejor obra española en el Salón del Cómic de Barcelona de 2007 y flamante, pero tardío, Premio Nacional de Cómic en 2009, es uno de esos cómics que no deben faltar en toda tebeoteca, un cómic que regalar a los que no leen cómics, a aquellos que creen que los tebeos son para niños o los que nunca entenderán porqué el cómic es arte.

En este trabajo Paco Roca narra la historia de Emilio, un director de una sucursal bancaria ya jubilado que se encuentra en el peor momento de su vida, viudo y lidiando con una familia para la que se ha convertido en una carga. Su difícil comportamiento con los que le rodean hace que sea internado en una residencia de ancianos donde se le diagnosticará Alzheimer. Allí, todavía lúcido, podrá ver con sus propios ojos cuál será su destino. Un final contra el que luchará ayudado por Miguel, su compañero de habitación, en una pelea sin victoria posible.

“Arrugas” es una historia sobre la memoria y su pérdida y sobre una enfermedad que no sólo nos roba lo que fuimos sino también lo que somos convirtiéndonos en una pizarra en blanco en la que ya no se puede escribir.

Hay en este cómic muchos momentos de comicidad y ternura pero con una segunda lectura trágica en un relato salpicado de anécdotas reales de ancianos. Todo ello narrado de manera con eficacia empleando diversos puntos de vista, así no sólo vemos a los personajes, también participamos de su particular modo de ver mundo que les envuelve a través del velo de su enfermedad, un mundo anclado en momentos del pasado que se resisten a olvidar.

Emilio es consciente de su enfermedad y lucha por evitar “subir a la segunda planta”, un lugar donde los enfermos ya no pueden valerse por si solos y permanecen en un continuo estado de ensimismamiento.

Las emociones están presente en toda la obra pero sin hacerla demasiado dura o sentimental para el lector; hay ligereza en el tono, pero también profundidad y dolor en esos ancianos y sus peculiares manías.

Particularmente hermosa resulta la historia del matrimonio que revive a diario una historia de amor nacida en su infancia.

Un dibujo sencillo, de linea clara y algo caricaturesco pero dotado de gran expresividad acompaña a una narrativa de extrema fluidez. La maestría del narrador brilla especialmente cuando, casi al final del álbum, con dos páginas y media totalmente en blanco, Paco Roca consigue decir mucho más que otros autores en páginas y páginas de dibujos y texto.

No puedo evitar las comparaciones al hablar de “Arrugas” de Paco Roca con la película de Mercero “¿Y tu quién eres?”. Y, en mi modesta opinión, “Arrugas” gana por por goleada.

Mientras que en aquella película se trivializaba sobre una enfermedad tan dura y se golpeaba al espectador con continuos efectismos dramáticos, en el cómic somos partícipes del dolor y de las pequeñas alegrías de los protagonistas sin caer en la banalidad o una pretendida moralina. Hay algo tranquilo y agradable en los ancianos de “Arrugas” que Mercero no supo expresar con sus sobreactuados protagonistas.

Por poner un pero al tebeo creo que la escena de la escapada resulta demasiado salida de tono y parece algo forzada.

Un cómic que nos acerca a la realidad de una dura enfermedad evitando la crudeza o ser demasiado edulcorado.

"Arrugas" ha sido editado por Astiberri

miércoles, 26 de noviembre de 2008

El cine en casa (y III)

¿Quién está más perdido, los supervivientes del vuelo 815 o los guionistas de Lost?


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Se conoce como cine de género aquel que puede englobarse en unos determinados códigos estéticos y/o estilísticos, fuera de los más globales drama y comedia aunque con evidentes connotaciones ya sean dramáticas o cómicas.
Así quedarían enmarcados dentro del cine de género las películas policíacas, de espionaje, acción, bélicas, ciencia-ficción o terror, principalmente.
El la televisión siempre ha habido series que cabría definir dentro de estos géneros, desde Star Trek a Outher Limits o de El Prisionero a Expediente X.
Sin embargo, fuera de ser consideradas series de culto, nunca han estado entre las favoritas del público y, salvo excepciones, los indices de audiencia nunca han superado a las series dramáticas de corte más clásico. En especial dramas familiares, médicos o judiciales.
Brillan con luz propia las series policíacas como C.S.I. o Ley y orden. Pero son las series de géneros como el fantástico o la ciencia-ficción las que, de un tiempo a esta parte, están viviendo su momento de gloria.
El ala oeste de la Battlestar Galactica
Series como Perdidos, un cóctel de fantástico, ciencia-ficción y drama de supervivencia; Heroes, la serie de superheroes que no quiere parecerlo; Battlestar Galactica, serie que mezcla ciencia-ficción y política; 24, acción pura y dura; The Unit, espionaje y paramilitarismo; Chuck y Último Aviso, mezcla de espionaje y comedia; Sobrenatural, terror y misterio al más puro estilo Expediente-X o Smallville, superheroes sin complejos. Y otras como Surface, Invasión, Tan Muertos Como Yo, Ripper o Journey Man que quedaron por el camino.
Nunca hemos tenido tanta variedad y calidad para elegir. El mejor cine de género en nuestra pequeña pantalla.
¿Mulder y Scully?... er... no. Los hermanos Winchester

martes, 25 de noviembre de 2008

A eso digo: ¡NO! (VII)


Relative strangers=Una familia casi perfecta  
Coeurs=Asuntos privados en lugares públicos
The Water Horse: Legend of the Deep=Mi monstruo y yo
I Want Candy=Vaya par de productorex  
The Game Plan=Papá por sorpresa  
Rogue=El territorio de la bestia  
Fools Gold=Como locos... a por el oro
My moms new boyfriend=Mi novio es un ladrón  
Drillbit Taylor=No tan duro de pelar Made of honor=La boda de mi novia
Forgetting Sarah Marshall=Paso de ti
Bonneville=El viaje de nuestra vida
Harold and Kumar Escape From Guantanamo Bay=Dos colgaos muy fumaos: Fuga de Guantánamo
Whisper=Hellion: El ángel caído  
College Road Trip=Loco viaje al campus
Meet Dave=Atrapado en un pirado
Love wrecked=Mi ligue en apuros  
The Love Guru=El gurú del buen rollo  
Married Life=El juego del matrimonio  
My best friends girl=Una novia para dos
Tropic Thunder=Tropic Thunder, una guerra muy perra


Y lo de este ya es obsesión. Hasta se repite.
Step Brothers=Hermanos por pelotas
The Rocker=Un rockero de pelotas  
Balls of Fury=Pelotas en juego
Dodgeball: A true underdog story=Cuestion de pelotas
Mr. Woodcock=Cuestión de pelotas (Mr. Woodcock)




























Menos una, todas estrenadas este año.

lunes, 24 de noviembre de 2008

Hoy recomiendo: Las guerras de los Sinestro Corps


Como ya he dicho anteriormente me gustan los tebeos de superheroes. Si bien es cierto que mi bagaje se fundamente más en las ediciones de Marvel, nunca he hecho ascos al catálogo de DC, su principal competidora.

Tratar de hacer entender a un profano el increíble universo que se oculta tras las páginas de los cómics de superheroes es prácticamente imposible. Las películas han ayudado, pero no se acercan ni de lejos al complejo entramado fruto de décadas de publicaciones. Universos entrelazados con multitud de personajes que dificilmente pueden ser abarcados en dos horas de metraje.

Uno de los más fascinantes conceptos de DC es el del cuerpo de Green Lanterns, una especie de policía universal en la que unos pocos elegidos patrullan un determinado sector del espacio.

El más famoso Green Lanter ha sido siempre el terrestre Hal Jordan, pero en nuestro planeta comparte el poder del anillo verde con Guy Gardner, John Stewart y Kyle Rainer.

Tomando como punto de partida una pequeña historia del maestro Alan Moore, Geoff Johns, artífice de esta saga, presenta la creación de los Sinestro Corps. Un cuerpo de portadores de un anillo amarillo bajo el mando de Sinestro, un Green Lantern renegado, ayudado por el Superman Cyborg, Superboy Prime y el Antimonitor.
Ya la tenemos liada.

Con un número especial que sirve de presentación y a lo largo de varias entregas de las series Green Lantern y Green Lantern Corps presenciamos una auténtica guerra entre los dos bandos portadores de anillos.

Es tal la magnitud del evento y tan grandes las bajas de los Green Lantern que los Guardianes, creadores de los anillos esmeraldas, deben reescribir las leyes de los Lantern y permitirles el poder matar para sobrevivir.

Una saga con algunos momentos francamente espectaculares y batallas grandiosas que jamás podremos ver en una pantalla de cine. El clímax, en nuestro planeta, permite que la plana mayor de personajes de DC tengan su pequeño momento en la gran batalla final.

Además la saga presenta nuevos conceptos como el que todos los anillos, sea cual sea su color, contienen la esencia de una entidad que representa diversos estados emocionales: Valor, Amor, Miedo, Esperanza...

Así somos testigos de lo que vendrá en la futura saga "La noche más oscura" con múltiples portadores de anillo.

Tras la decepcionante Crisis Infinitas se agradece este cómic, realizado con inteligencia y corazón y con la mirada puesta en el futuro


¡Al ataquerl!

jueves, 20 de noviembre de 2008

Las mejores series que nadie ve (II): Veronica Mars



Maltratada por "La 2" y emitida en el canal Cosmopolitan TV, no precisamente uno de los más populares de las digitales, Veronica Mars es una de las mejores series de los últimos tiempos, una mezcla de serie policíaca y drama adolescente que, por desgracia, no tuvo el mismo éxito de público que crítico lo cual la ha convertido en una serie de culto para paladares exquisitos.

Quizá ese toque "teen" alejó a potenciales espectadores más talluditos y su complejidad y sofisticación hizo lo mismo con los espectadores más jóvenes. A pesar de ello completó tres temporadas con algunos de los mejores momentos televisivos de los últimos tiempos.


De Verónica Mars me gusta hasta la sintonía.

La primera temporada nos sitúa en Neptune (California), una localidad donde, o eres rico... o trabajas para ellos. Verónica Mars es una de las chicas más populares del instituto, su padre es el Sheriff y su novio, Duncan Kane, uno de los mejores partidos de la ciudad, la hermana de su novio, Lilly, es su mejor amiga y es, a su vez, novia de Logan Echolls, hijo de un famoso actor que no vive sus mejores momentos.

Todo cambia el día que Lilly aparece asesinada, el padre de Verónica acusa al padre de Lilly y Duncan como sospechoso del asesinato y su obsesión acabará con su carrera arrastrando a Verónica con ella, además Duncan corta su relación poco antes del asesinato sin dar explicaciones. La madre de Verónica abandona el hogar y, para colmo de males, Verónica es drogada y aparentemente violada durante una fiesta de los chicos del instituto donde aparece con la palabra "puta" escrita en su vestido.

Convertida en una paria será rechazada por su antiguo novio y convertida en objeto de burlas de Logan y su pandilla.

Su padre crea una agencia de detectives en la que Verónica trabajará de ayudante resolviendo casos al tiempo que investiga la muerte de su amiga.

Esta primera temporada abarca toda esa trama salpicada por episodios autoconclusivos con pequeños casos de investigación.

Resuelto el misterio de la primera temporada no hay lugar para el respiro y la segunda temporada comienza con un aparente accidente en el que mueren varios alumnos del instituto. Esta segunda temporada además atará varios cabos de la primera y cerrará el destino de varios personajes al tiempo que Verónica inicia una relación complicada con el improbable Logan Echolls.

La tercera temporada, con la sombra de la cancelación sobre la serie, presenta varias tramas largas sin el gancho de las primeras pero ofreciendo un nuevo entorno, la Universidad de Neptune, que permite añadir nuevos personajes al elenco.

El final resulta algo precipitado y, aunque cierra todos los misterios abiertos, deja varias subtramas en el aire a la espera de un posible retorno que, por las últimas noticias, puede ser en un largometraje que situaría a Verónica como becaria del FBI. Entretanto podemos consolarnos con una posible cuarta temporada editada en cómics.

La serie, como ya he dicho, es densa y compleja y el espectador ocasional puede acabar perdido entre tanto misterio y personaje, pero una visión de conjunto nos muestra el magnífico trabajo de planificación de los guiones. Aderezado con unas buenas interpretaciones y no pocas "apariciones estelares" de parte del elenco de Buffy Cazavampiros, tiene en su protagonista, Kristen Bell, su mejor baza.

Verónica-Kristen es la novia que todos hubieramos querido, si somos del sexo masculino, y la amiga ideal de toda chica. Guapa, sexy, inteligente, divertida, mordaz, valiente y decidida.

Huerfanos de la serie hemos podido verla en Deadwood, donde sufriría uno de los más brutales destinos que he visto en una teleserie, y en Heroes como villana con poderes eléctricos.
Kristen, I love You

miércoles, 19 de noviembre de 2008

viernes, 14 de noviembre de 2008

Las mejores series que nadie ve (I): Coupling

No, no es el Central Perk

Coupling es una poco conocida serie británica de humor creada por Steven Moffat (el mismo de la reciente Jekill) que se emitió desde el año 2000 al 2004 en la BBC repartida en cuatro temporadas.

Como la mayoría de series británicas cada temporada sólo tiene seis episodios.

Su esquema recuerda mucho a Friends, varias parejas de treintañeros que se reúnen a tomar copas en un pub y nos hacen cómplices de sus vivencias y pensamientos. Sin embargo un rápido vistazo nos marca las muchas diferencias que se resumen en una, su tono adulto.

Mientras que en Friends los protagonistas tendían a ser eternos adolescentes en Coupling nos encontramos con auténticas relaciones y conversaciones adultas. El tono "picante" y los dobles sentidos abunda en todas las frases y conversaciones, las confusiones y enredos que estos provocan dan lugar a algunos de los mejores sketches que he visto en una sitcom en los últimos años.

Las conversaciones pueden ser banales o absurdas pero siempre girarán sobre el sexo opuesto, el pacatismo que suele haber en la sociedad americana da paso a un punto de vista más europeo y desenfadado sobre el sexo y las relaciones.

No me confundáis, no hay escenas de sexo ni diálogos soeces pero sí que abundan conversaciones del tipo que solemos tener con los amigotes cuando vamos un tanto pasados de cervezas.

Diálogos sobre porqué los hombres vemos porno aunque tengamos pareja (y la defensa más acertada que he visto nunca sobre ello), las ventajas de una mujer con cerebro en los pechos, cómo superar situaciones incómodas imaginando a la gente desnuda (cosa nada aconsejable en un entierro), cómo recuperar a tu ex pareja prometiéndole tríos con mujeres o cómo ligar en un baño con una desconocida, al salir a comprar preservativos, mientras tu pareja espera en la puerta de al lado para hacerte el amor .

Hay episodios brillantes como ese en el que Jeff intenta ligar con una mujer israelí que sólo habla hebreo y se nos muestra la misma situación desde el punto de vista de cada interlocutor y el desastroso final que conlleva.

Los personajes están perfectamente caracterizados:
Steve Taylor, algo inseguro con las mujeres que tras una complicada relación con Jane (una indespegable, en palabras de Jeff) conoce a Susan Walker con la que inicia un nuevo noviazgo.

Susan es una mujer segura de si misma y bastante liberada que puede llegar a ser algo intimidatoria con sus parejas y que parece haber encontrado en Steve su mejor complemento.

Sally Harper es su mejor amiga, cosmetóloga y obsesionada con la juventud y el paso del tiempo, algo desesperada por encontrar pareja se lía con Patrick Maitland el mismo día que Susan le da plantón.

Patrick es el típico guaperas más bien descerebrado que se cree un regalo divino de las mujeres... algo que quizá sea cierto teniendo en cuenta que Susan le llamaba "el trípode".

Jane Christie, la ex de Steve es una neurótica posesiva que siempre ha conseguido engañar a Steve para que no la deje utilizando artimañas sexuales. Aceptará a Susan a regañadientes pero siempre con un ojito puesto en SU ex.

Por último está Jeff Murdock, el único personaje realmente inmaduro del sexteto, un niño grande aficionado a las consolas y con auténtico terror a las mujeres, es el "colega del porno" de Steve con el que ha prometido que cuando uno muera el otro irá a su casa para deshacerse de todo el porno que tenga y salvaguardas su honra, es también compañero de Susan y el que la presentó a Steve. Salió con Susan en una ocasión pero su extremo nerviosismo ante una mujer tan lanzada imposibilitó toda continuidad. Es el personaje más divertido y Richard Coyle, el actor que le interpreta, hace una composición delirante.


Jeff, te queremos

Si te gustó Friends pero la notaste algo blanda esta es tu serie, en mi opinión tan divertida como aquella y mucho más adulta.

Blade Runner: Recuerdos y reflexiones.

La primera vez que vi Blade Runner no me gustó. Nada.

En mi defensa diré que sólo tenía 11 años y mis referentes cinéfilos eran la TV, las sesiones infantiles de los domingos por la tarde y el Superman de Richard Donner. Ni siquiera había visto todavía ningún Star Wars.

Fui aconsejado por un compañero del colegio ya que su hermano mayor la había visto y le había gustado mucho y mi decepción fue mayúscula. No entendí nada, algunas escenas me daban miedo y encima a una tía se le veían las tetas (un shock, mi primer desnudo en pantalla) lo cual me incomodó bastante (iba con mi hermano mayor).

Por aquella época frecuentaba la biblioteca de mi barrio y comencé a aficionarme a las revistas de cine que allí había, concretamente Dirigido Por... En uno de sus números analizaban la película y la ponían por las nubes y, aunque no entendí todos los detallas, empecé a darme cuenta que la culpa de mi disgusto tal vez no la tuviera la película.

El tiempo fue dando al film una estela de mito, y cualquier referencia posterior venía acompañada por la coletilla "de culto". Tuve que esperar al primer "director's cut" para poder volver a verla y reconsiderar mi postura y, efectivamente, en ese segundo visionado reescribí todas mis impresiones. Noté en falta la voz en off que no me parecía redundante y le daba un toque noir a la película, pero la eliminación del Happy End me pareció mucho más acorde con el tono de la película.

Y desde entonces nunca la había vuelto a ver. Con el auge del DVD esperaba la salida en ese formato de la película, pero Ridley Scott se hacía de rogar, sólo una edición importada en VOS se había comercializado pero no me había interesado. Hasta que se supo el motivo de la tardanza: una nueva Director's Cut con alguna escena añadida (o extendida) y efectos especiales retocados amén de remasterizaciones varias.

Primero se editó el famoso (e inalcanzable) maletín con 5 versiones de la película, múltiples extras y varios objetos de merchandising. Pero, por fin, se ha comercializado la película en dos ediciones, una, la normal, y otra con todos los DVD del maletín pero sin objetos añadidos.

Y así, después de tantos años, he podido reencontrarme con este clásico moderno.
http://www.elpais.com/recorte/20070625elpepucul_1/LCO340/Ies/Cartel_promocional_Blade_Runner.jpg
De momento sólo he visto el último Director's Cut, como mi recuerdo de las versiones previas no es muy bueno enumeraré algunas de las impresiones que he tenido aunque quizá sean producto de mi mala memoria.

Como nuevas escenas sólo he percibido un pequeño flash de dos orientales con máscaras bailando en una pantalla y la muerte del personaje de Daryl Hannah me ha parecido más larga y agónica de lo que recordaba. Las vistas de la pirámide de la empresa fabricante de replicantes me han parecido más impresionantes, no se si hay retoque digital, pero si no es así, resultan muy reales para la época en que se rodó. Se ha mantenido la escena del unicornio y la voz en off sigue desaparecida.

La película me ha gustado más que nunca, el toque de cine negro con estética futurista encaja a la perfección y se me ha hecho muy corta y entretenida, algo que revisando películas de hace unos años no siempre me ocurre. La historia, a pesar de su sencillez, resulta densa y el final es brillante. El monólogo final de Hauer sigue siendo brutal (voz de Constantino Romero incluida en la versión doblada) y el epílogo despeja toda duda sobre si Deckard es un replicante.

Sobre este punto diré que en la primera versión la cosa no quedaba tan clara, supongo que Scott decidió matizarlo más y añadió la escena del unicornio que, con el origami que también lo representa, deja bastante claro que Deckard tiene recuerdos implantados y que hasta el personaje de Edward James Olmos los conoce. No son pocos los que dicen que esa escena onírica no es más que una secuencia extraída de la siguiente película de Scott (Legend) y yo estoy de acuerdo. Supongo que la figura del unicornio de origami y la presencia de este animal en Legend fue una feliz coincidencia que Scott supo aprovechar.

Otro detalle destacable es la obsesión por los ojos que el director tiene a lo largo de la película: en la escena aérea inicial inserta un plano de un ojo, luego en el test que se hace los replicantes los ojos son primordiales y destacan en todas las escenas con el aparato empleado para dichos test. Los replicantes acuden a un diseñador de ojos en una escena con diversos planos de ojos envasados, el fabricante lleva unas curiosas gafas y, posteriormente, un replicante extrae un ojo de una cuba con nitrógeno líquido y se lo coloca en el hombro. El director de la empresa diseñadora también lleva unas extrañas gafas que aumentan y distorsionan sus ojos, cuando es asesinado por Hauer este lo hace introduciéndole los dedos en los ojos. Luego Daryl Hannah pinta sus ojos con un spray negro y, más tarde, Hauer bromeará colocándose unos ojos de juguete. Hay muchos más pero estos son los que me han llamado más la atención.

Se ha criticado mucho la película como demasiado esteticista pero a mi me parece que si se pretende crear una determinada atmósfera se debe cuidar mucho la imagen, en una película ambientada en el futuro es primordial y la presencia de pantallas publicitarias, coches voladores, lluvia omnipresente y contaminación palpable son imprescindibles para crear el tono, tanto futurista como de cine negro. Scott es un director irregular aunque por encima de la media y con un estilo propio que da mucha importancia a la ambientación y que debe a sus orígenes publicitarios. Si tengo que elegir entre su estética publicitaria o la de vídeo-clip con montaje inconexo que nos inunda me quedo con la primera. Si además cuida los guiones este director puede dar muchas alegrías. Su último trabajo, "American Gangster", es de lo mejor que he visto en años, digno del mejor Scorsese.

martes, 11 de noviembre de 2008

Cómo hacer una crítica de cine (sin haber visto la película) en once sencillos pasos


1º Ante todo ¡fuera complejos!

Corre el bulo de que todo crítico de cine es un director frustrado ¡mentira! Del mismo modo que no hace falta ser Arguiñano o conocer una receta para saber si un plato es de nuestro gusto tampoco hay que tener ninguna experiencia o conocimiento especial en realización cinematográfica para saber si una película nos gusta. Porque, no nos engañemos, una crítica no va de si una película es buena o mala sino de si nos ha gustado o no y luego escribir algo totalmente diferente.

2º Lo importante es la jerga
Como he dicho no hay que ser Truffaut o Bogdanovich y tener aspiraciones de cineasta, tampoco hay que conocer los entresijos de una película pero, evidentemente, hay que parecer que sabemos de lo que hablamos y para ello nada como conocer la jerga. Un palabro bien colocado nos dará toda la credibilidad necesaria para parecer un experto cinéfilo. Términos como "ópera prima", "estructura temporal", "flasback", "banda sonora", "fotografía", "interpretación", "guión", "montaje" "caracterización" o "ambientación" deben salpicar toda crítica que se precie de serlo.

3º Lee, lee y lee... y luego copia
Antes de afrontar una crítica es fundamental leer lo máximo posible sobre la película, conocer la carrera previa del director es primordial, algún detalle sobre el guión y saber bien el "cast" de la película. Si se lee alguna crítica o reseña hecha por otros mucho mejor, no te faltará material para "fusilar".

4º Ver la película antes es perder el tiempo
Un visionado previo de la película puede ayudar, pero es mejor evitarlo. Nada puede influir más en una crítica objetiva que una valoración en función de nuestros gustos, así que siempre será preferible no verla para no sentirnos obligados a expresar nuestros sentimientos reales. Lo importante es la información previa y cómo plasmar esos datos de manera imparcial. Si Antonio Gasset y Andrés Arconada pueden hacerlo tu no vas a ser menos. Además te ahorraras más de un sufrimiento y puedes aprovechar ese tiempo que no vas a perder en pillar una cogorza o dedicarte a tus otras artes onanistas.

"11:14 es la típica película de terror adolescente" Andrés Arconada

5º Los festivales. Tu gran aliado
Los múltiples festivales de cine son una ayuda inestimable para tu labor crítica por dos motivos, el primero son las escasas posibilidades de que esas películas iranies, rumanas o congoleñas lleguen a estrenarse en salas comerciales, las posibilidades de que alguien pueda contrastar tu crítica de esas películas son nulas así que puedes contar lo que quieras sin miedo. Eso sí, toda película iraní es "maravillosa y arriesgada", si es del este de Europa será "valiente y aleccionadora" y si es de la India ha de ser "alejada de los tópicos de Bollywood". Toda película independiente norteamericana tendrá el calificativo de "fuera de los cánones más comerciales".
La segunda ventaja de los festivales es que, con el cine comercial, permite el visionado previo de muchas películas por compañeros de profesión con lo cual, cuando se estrenen en salas ya tendremos el trabajo de "investigación" prácticamente hecho.

6º Conoce al director
Con sus más y sus menos todo director suele mantener unos niveles similares en toda su filmografia, hay que estar al tanto de sus periodos de decadencia pero, por lo demás, cualquier crítica a un film anterior puede servirnos de guia para la actual película. "Fiel a su estilo" debe quedar grabado en tu mente.

7º En caso de equivocación no nos pongamos nerviosos
Un traspiés lo puede tener cualquiera y grandes directores también hacen grandes fiascos. Si nuestra labor de recopilación de datos no ha sido buena podemos cometer el error de ensalzar el último truño de David Linch. Pero tranquilidad, tres sencillas frases nos librarán del dedo acusatorio:
-Pues a mi me ha gustado.
-Lo que pasa es que no la has entendido.
-Tu no tienes ni idea de cine.

8º Tópicos típicos
Nada como espolvorear varios tópicos para salpimentar tu crítica. "El cine no se ve con los ojos, se ve con el corazón", "prometedor primer trabajo", "esforzada labor histriónica", "montaje vertiginoso", "ambiente opresivo", "música evocadora", "el grán público", "guión de acero", "fallida labor de dirección"... una buena frase hecha llenará el vacío de tu crítica.

9º Califica con números o estrellas
Una puntuación antes de cualquier crítica se hace imprescindible, en la mayoría de los casos evitará que el texto sea leído ya que será la única guía que busque el potencial espectador.

10º Si no es un estreno mucho mejor
Nada como los clásicos. En reestreno o pase televisivo nos permite hacer crítica "en dos patás". Internet, una inmensa bibliografía (a ser posible prestada o de bibliotecas públicas) o "La guía del video-cine" de Carlos Aguilar nos ofrecen el trabajo literalmente acabado. Sólo hay que "transcribir".

11º Irse por las ramas, una meta
Habla de la historia, repasa la carrera de actores y directores, comenta películas similares, relata anécdotas del rodaje, haz un listado de premios y una valoración del pase de la película por festivales, coloca una cita cultural para parecer más leído... todo vale para desviar la atención sobre el verdadero asunto. Si te enrollas lo suficiente el lector se dará por satisfecho sin haber encontrado ninguna crítica real en todo lo leído.

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“Para ir al cine con esta cartelera hay que tener coeficiente intelectual negativo”

viernes, 7 de noviembre de 2008

A eso digo: ¡NO! (V)


¿Porqué narices me tienen que estropear el visionado del programa o película que estoy viendo con "moscas", publicidad o anuncios promocionales insertados encima de la imagen? Y luego nos hacen pagar canon para que respetemos la propiedad intelectual.

A ver qué le parecería a Ramoncín que la discográfica insertase cortes publicitarios en medio de las canciones al editar sus discos. O a Perez Reverte anuncios de ING cada 20 páginas de sus Alatriste.

Ni respeto al autor ni al espectador.

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Los Chenchos


Como tantos años la fería, como llamábamos a aquellas casetas de tómbola y las inseguras atracciones que las acompañábamos, había vuelto a nuestra localidad.

Año tras año llegaban, a veces acompañadas de algún circo de nombre rimbombante como Gran Circo Europa o Circo Mundial, y entonces hacían las delicias de niños y no tan niños que disfrutaban de El Barco Vikingo o el clásico Tren de la Bruja.

Y aquellas tómbolas, que repartían sobrecitos o extrañas tablas con tres cartas de la baraja española pegadas, ofrecían todo tipo de premios. Desde jamones y longanizas a botellas de vino, cuberterías, freidoras, consolas coreanas que imitaban a las Nintendo y Sega y hasta televisores de 14’’.

Pero todos los años algún peluche o muñeco era la estrella y el vocero que coreaba los números premiados cantaba alguna rima bastante penosa a costa del muñeco de moda.

Un año era la muñeca Pepona o Chochona, tanto daba, otro el Naranjito. Los pitufos, Epi y Blas, Espinete o, más tarde, todo un clásico: el Perrito Piloto al que nunca supe encontrar porqué era piloto y mucho menos de que clase.

Me gustaba pasear cuando aún montaban las atracciones o las casetas y tómbolas. En alguna ocasión los operarios nos habían invitado a subir a alguna atracción “para probarla” y nosotros, tan temerarios como inconscientes, subíamos encantados sin saber que nuestra vida podía correr peligro.

Y en una ocasión ocurrió que un hombre, mientras desembalaba el muñeco que tocaba ese año se le quedó mirando con extrañeza. Al verme me preguntó cómo se llamaba ese peluche a lo que respondí: -Bart Simpson de Los Simpson.
El hombre sonrió satisfecho y me dio las gracias.

Pocos días después iba con mi pandilla a disfrutar de las ferias y me acerqué a aquella caseta, el hombre, micrófono en mano gritaba: -¡Los Chenchos, los Chenchos! ¡El niño de los Chenchos!


Bart Chencho

lunes, 3 de noviembre de 2008

Tamaño natural

Lars, un joven muy especial

El fin de semana, si no salgo por ahí, suelo dedicarlo a ver películas. Intento ser ecléctico y ver un poco de todo, sin demasiados prejuicios pero intentando que no tenga que pasar a modo mononeuronal.

Intento ver alguna película palomitera tras una buena comida, si la película lo merece suele ser el mejor acompañamiento a una buena siesta.

No le hago ascos al cine español pero intento escoger las películas españolas informándome bien antes para saber a qué me enfrento. Son ya muchas las decepciones pero también hay sorpresas agradables muy de cuando en cuando.

Y luego siempre cae alguna película "de buenas críticas". Algo de calidad, un buen drama o alguna películilla independiente.

Si el año pasado una de mis favoritas fue Pequeña Miss Sunshine este año, sin duda, mi pequeño tesoro ha sido Lars y una chica de verdad.

Una de esas pequeñas joyas que se ven con una sonrisa perpetua (aunque se congele en más de un momento) y que, cuando termina, me hace sentir que han sido algunos de los mejores minutos que he invertido delante de una pantalla. Una película que seguro ha pasado inadvertida por nuestras salas a pesar de haber estado nominada a varios Oscar (su guión lo merecía) y tener varios premios.
Lars y una chica de verdad es una historia sobre la imposibilidad de relacionarse y expresar nuestros sentimientos, sobre la búsqueda del amor y cómo las personas pueden afectar a las que les rodean haciéndoles mejores seres humanos.

Lars y una chica de verdad cuenta la historia de un joven cuya madre murió al nacer y de cuyo padre nunca recibió afecto, para colmo su hermano mayor escapó del hogar familiar en cuanto pudo y ahora vuelve casado y esperando un hijo.

Nuestro protagonista tiene una imposibilidad incluso física de expresar y recibir afecto, el mismo contacto humano le causa dolor y apenas se relaciona con su entorno. A pesar de ello es muy querido por su comunidad que le ve como un joven dulce y educado.

Todo cambia cuando hace acto de presencia Bianca, una joven de imposible biografía que ha conocido por internet y que además necesita silla de ruedas.
La familia conoce a Bianca... y alucinan.

Cuando su hermano y cuñada conocen a Bianca no pueden creer lo que ven, Lars ha sublimado todas sus imposibilidades en una persona que ni tan siquiera es real. Diagnosticado como un episodio delirante su doctora aconsejará que se le siga la corriente al tiempo que le trata.

Así todo el pueblo participará de la farsa y poco a poco Bianca ejercerá su magia haciendo que familia, amigos y conocidos lo den todo por Lars provocando en este un sorprendente cambio que le acercará a la compañera de trabajo por la que siempre ha sentido algo.

Rozando el absurdo y evitando, con nota, caer en el ridículo o la cursilería, la película plantea, en tono de comedia, grandes temas sobre cómo somos y cómo el dolor puede crear barreras que sólo el afecto puede derribar.

Lars y una chica de verdad es de esas películas que, cada vez en menos ocasiones, nos reconcilian con el cine que se hace hoy en día y nos demuestran que sólo hacen falta buenas historias contadas con sentimiento.

A eso digo: ¡NO! (IV)

¿Por qué en bares, restaurantes, pubs, gasolineras y centros comerciales, muchas veces con un aspecto inmejorable, todo se viene abajo cuando entramos a los baños?



sábado, 1 de noviembre de 2008

Yorick contra todas

Hoy voy a hacer una recomendación de lectura y así aprovecho un texto que ya hice hace tiempo, que es finde y no puedo dedicarle mucho tiempo al blog.

Y el último hombre.

Escrita por Brian K. Vaugham y dibujada principalmente por Pia Guerra. Vaugham es un joven guionista que ha sabido destacar tanto en el género de superhéroes como en historias de más enjundia. De los primeros sobresale la serie Runnaways de Marvel donde crea de la nada a un grupo de adolescentes con poderes, descendientes de unos villanos hasta el momento desconocidos. El tratamiento desenfadado, la perfecta caracterización de estos chavales y el alejamiento de los tópicos habituales del género le ha ganado el favor de la crítica y ha convertido la serie en una de culto. Actualmente la serie ha recaído en las manos de Joss Wheddon, creador de Buffy, Angel y Firefly para televisión con lo cual es de esperar que la calidad no decaiga.

Su otra serie de "superhéroes" es toda una rareza y, para muchos, su mejor trabajo: Ex machina. Una serie donde un ex-superhéroe se dedica a su carrera política. El ala oeste de la Casa Blanca se da la mano con el mundo de los superhéroes en esta estupenda serie.

Pero toca hablar de Y el último hombre. Una serie que se podría englobar dentro de la ciencia-ficción post apocalíptica pero que basta un simple vistazo para darse cuenta que la definición se queda corta y no le hace justicia. La mejor manera de entender de qué va la serie es seguir su argumento: Yorick es un bueno-para-nada aprendiz de mago y escapista que se saca unos ingresos cuidando del adiestramiento de monos para emplearlos en ayuda a minusválidos, el mono a su cargo es Ampersand (el símbolo & o letra "Y" en su uso habitual, la Y griega será recurrente en toda la obra y, más o menos oculta, se puede encontrar en todas las portadas). Yorick, a pesar de ser un poco friki y más bien inútil, tiene una estupenda novia llamada Beth que, cuando inicia la historia, se encuentra en Australia.

En ese punto sucede el desastre, por motivos aún desconocidos un virus invade todo nuestro planeta matando a todo mamífero con el cromosoma Y, todos los machos de la tierra mueren en una agonía provocando todo tipo de desastres a su paso. ¿Todos? no, Yorick y Ampersand sobreviven inexplicablemente.

Yorick, muy a su pesar, emprende un viaje para ¿salvar a la humanidad? ¿Encontrar la cura? ¿Procrear con todas las mujeres vivas? ¿Convertirse en El Elegido? Pues no, se va a buscar a su novia.

A lo largo de años la serie se convierte en la búsqueda de Beth pero también en la resolución de todos los enigmas que se han planteado ¿sigue el virus activo y pueden nacer varones de las mujeres embarazadas en el momento de la tragedia? ¿Quién lo creó y con qué fin? ¿Por qué Yorick y su mono no están afectados? ¿Hay más hombres vivos? ¿Cómo se crean y son las nuevas sociedades sin los hombres? ¿Seguirá Yorick fiel a Beth ante tanta tentación?

Alejada del tono oscuro y catastrofista de otras historias post-apocalípticas (género que no me gusta especialmente) la historia avanza llena de emoción, suspense y continuas sorpresas y giros. Se indaga en los personajes, sus historias, sus vidas pasadas y sus motivaciones dando mucha importancia a su evolución y cambios frente al nuevo status quo.

El guionista ha anunciado el fin de la serie a la altura del número 75 (en USA, aquí se publica en tomos) por lo que ya está prácticamente acabada en estos momentos.

Se ha hablado de una película y una serie de televisión (que sería lo ideal) pero de momento nada en firme, dado que el escritor ha sido uno de los últimos fichajes para escribir la serie Perdidos (que bien "perdida" anda, por cierto) espero que se formalice la serie de televisión porque merecería la pena verla en pantalla.

Entre los dibujantes destaca Pia Guerra, una de las pocas mujeres del medio, que sin ser nada del otro mundo aporta un dibujo limpio, claro y de buena narrativa alejado del feísmo y suciedad típicos de la línea Vertigo.

Sobre su edición en nuestro país, como suele ser habitual ha sido errática, empezó Norma Editorial su publicación en tomos de unos 4 ejemplares americanos, cuando perdió los derechos, Planeta siguió editándola en el punto en que esta lo dejó, en tomos algo mayores (unos 6 ejemplares USA) sin periodicidad clara. Paralelamente empezó a publicar lo editado por Norma en una serie mensual que por el módico precio de 3 € ofrecía dos cómics USA, en estos momentos esta serie ha sido cancelada y, por no seguirla, desconozco si incluyó todo lo editado por Norma, si es así es de esperar la publicación de algún tomo hasta completarla. Mi consejo es comprar todo lo editado por Planeta y, si falta algún ejemplar buscar el tomo correspondiente de Norma o ver si Planeta lo publica (seguro que lo hace).
http://www.coverbrowser.com/image/y-the-last-man/45-1.jpg
En todas las portadas aparece la
letra "Y" más o menos oculta

viernes, 31 de octubre de 2008

El cine en casa (II)

Tal y como comenté en una entrada anterior, las series de televisión han dado en los últimos años un enorme salto cualitativo, entre otras razones por el traspaso de escritores del cine a la televisión así como la búsqueda de mayor reconocimiento, control y prestigio que los guionistas suelen obtener en las teleseries.

Otro de los motivos por el que las series estadounidenses parecen haber incrementado su calidad y, sobre todo, su nivel interpretativo lo tiene el paso de muchos actores, más identificados con el cine, al ámbito televisivo.

El que un actor de televisión de el paso a la gran pantalla y obtenga éxito y prestigio no es algo demasiado frecuente. Son medios muy diferentes y muy endogámicos en los que se mira con recelo al actor televisivo como de categoría menor.
Pues no, no es el hombre sin nombre.

No es raro, sin embargo, que los actores den sus pinitos en televisión, pero normalmente es un paso más en sus carreras. Así tenemos casos como los de Clint Eastwood, Nick Nolte, Denzel Washington o Johnny Deep que, en sus comienzos, alternaron series con pequeños papeles en el cine y, si hay que recordar un par de actores cuyo triunfo televisivo les abrió con puertas de oro su paso a la gran pantalla, no podemos olvidar a Bruce Willis y George Clooney.

Sin embargo suelen ser casos aislados, un éxito televisivo no siempre implica repetir en el cine y así lo atestiguan gente como Tom Selleck, Ted Danson, David Caruso o Rob Morrow cuyo paso al séptimo arte es más bien discreto y han tenido que volver, con el rabo entre las piernas, al medio donde conocieron mejores momentos. Y eso por no hablar del elenco de Friends al completo.

Sin embargo en los últimos tiempos la tendencia parece haberse invertido. Actores de todo pelaje, desde estrellas consagradas a viejas glorias o actores de reparto habituales, se está produciendo un auténtico trasvase de figuras de la gran pantalla a la pequeña.

No es raro que actores en el ocaso de sus carreras, con la fama dándoles la espalda o intentando reverdecer una carrera moribunda se encaminen a las productoras televisivas buscando su momento. El mejor ejemplo está en George Peppard, un actor casi olvidado que consiguió el mayor éxito de su carrera y el papel por el que siempre será recordado.
Anibal desayunó con diamantes... y con Audrey.

Hoy día, muchas series de nuevo cuño recurren a actores cuya carrera está en declive para dar un toque de distinción a su programa. Así un actor ochentero cuyo mayor mérito fue protagonizar la primera adaptación de El Silencio de los Corderos se convierte en un personaje que ya es mítico, el Gil Grissom de C.S.I.


William Peterson con varios años y kilos menos.

Otro actor en horas bajas, Treat Williams, logra un importante éxito con Everwood, Gabriel Byrne ofrece su estoica personalidad en la serie de HBO En Tratamiento, Jeff Goldblum no tiene éxito con su Raines, cosa que no les ocurre a Mary-Louise Parker y Elizabeth Perkins en Weeds, Mandy Patinkin compagina sus gorgoritos con temporadas en series como Chicago Hope, Tan Muertos como Yo o Mentes criminales.


"Hola, me llamo Iñigo Montoya, tu mataste a mi padre. Preparate a morir".

Peter Coyote lo intenta con Los 4400 y The Inside. Sally Field triunfa en Cinco Hermanos. Andrew McCarthy y Patrick Dempsey nos hacen olvidar sus papeles en comedietas ochenteras en Weeds y Anatomía de Grey respectivamente. Un semidesaparecido Tom Berenger resurge en October Road, Alec Baldwin obtiene reconocimiento y premios en Rockefeller Plaza al igual que Glen Close en The Shield y Damages al igual que la Oscarizada Holly Hunter con su Salvando a Grace.

Cuando soy buena soy muy buena, pero cuando soy mala, soy mejor.


Geena Davis, Martin Sheen y Mary McDonnell ejercen como presidentes en la pequeña pantalla mientras que Charlie Sheen, Kiefer Sutherland, James Spader triunfan en diferentes registros y James Woods y Denis Leary consiguen series hechas a su medida.

Luego estarían esos actores que compaginan el cine con apariciones estelares en diversas series como Forrest Withacker en The Shield, Rebeca de Mornay en Urgencias, El Abogado y John Form Cincinnati o Donald Sutherland en Dirty Sex Money. Pequeños parentesis que no presagian un cambio definitivo en sus carreras.


¿Televisión? Venga hombre, que acabo de ganar un Oscar.

Aún dejándome más de uno olvidado lo que está claro es que en estos momentos la televisión vive días de gloria en los que buenas historias con mejores actores que aportan caras reconocibles y carreras prestigiosas, engrandecen las series que llegan a nuestros televisores.
Si esto no es cine en casa...

jueves, 30 de octubre de 2008

A eso digo: ¡NO! (III)

Gracias pero no tengo problemas eréctiles.

Lo siento, pero no tengo ninguna cuenta en su entidad así que no voy a entrar a su página para darle mis claves de usuario.

Muy tentadora su oferta de sexo gratis pero ando servido.

Lo sienta pero mi no pretende de trabajo en la sua empresa multimillonaria today.

Apadrinaría un niño pero desde luego no en su desconocida organización.

¿Me ha tocado un viaje al Disney World de Orlando? Pues gracias, pueden enviarme los pasajes de avión y bonos de hotel a este mismo mail.

¿Y ahora me ha tocado una millonada en una Lotto de un país que nunca he visitado? Extiendan su cheque a mi nombre y envíenmelo a casa. Muy agradecido.

Muy interesante su oferta de Rollex a 100 euros pero creo que paso.

No me vendría mal adelgazar pero no creo que sus medicamentos ilegales sean lo más aconsejable por mi endocrino.

Lo siento, no entiendo el esperanto o lo que sea esa jerga que utiliza.

Yo fui un Marvel Zombie adolescente



El primer cómic Marvel que leí fue un Spiderman en aquellos tomitos que editó Vértice. Precisamente se trataba del número siguiente a la muerte de Gwen Stacy lo que tuvo dos consecuencias:
1ª Que uno de los momentos más importantes de la historia Marvel perdiera toda su trascendencia para mí.
2ª Que acabara totalmente enganchado para siempre a esos tebeos.

Y es que, habituado a mis lecturas infantiles de Mortadelos y relatos ilustrados, encontrar una historia en la que al protagonista acaban de matarle a la novia y, para colmo, al volver a casa se encuentra a su mejor amigo en un cuelge de drogas fue todo un shock para mi.

Y lo mejor es que la historia no acababa sino que se anunciaba un nuevo número en el que continuaría. Por no hablar, claro, que el protagonista llevaba un dizfraz, tenía superfuerza, se pegaba a las paredes y lanzaba telarañas.

Hoy en día, con internet, consolas, decenas de canales de televisión y películas con efectos especiales asombrosos la magia es algo tan habitual en la infancia que, con pocos años, los niños casi han perdido su capacidad de maravillarse. Pero para mí, que por entonces teníamos un televisor en blanco y negro en el que sólo se veía un canal (el UHF no lo cogía nuestra antena) y el cine consistía en auténticas batallas campales de pequeñuelos en sesiones infantiles con lo "ultimo" de los Hermanos Marx o Tarzán, aquel pequeño librito con viñetas era una ventana a todo un mundo maravilloso.

Como los recursos económicos de los que disponía por aquellos años se limitaban a "la paga" que mis padres me daban los viernes solía juntar aquellas pocas pesetas con mi hermano mayor y las invertíamos en la papelería del barrio donde, a cambio de 25 pesetas y un tebeo, te sacaban un montón del que podías elegir un tebeo que solíamos leer unas mil veces antes de volver a cambiarlo por otro.

Aquellas pilas de tebeos eran totalmente arbitrarias y podías encontrar desde los típicos Mortadelo y Zipi Zape a los tebeos para niñas como Lilí y Esther (que solía leer con bastante curiosidad, por cierto), los Jabato o Capitán Trueno o aquellos Clásicos Ilustrados que adaptaban a viñetas libros clásicos de la literatura... y de vez en cuando, aparecía algún Spiderman o Vengadores. Eran la joya de la corona y, por norma general, cuando encontrábamos uno lo conservábamos para siempre, lo que nos obligaba a ahorrar un poquito para poder comprar algún Mortadelo que luego poder cambiar.

Y es que, al igual que ahora curiosamente, encontrar cómics de Superheroes en los quioscos o papelerías no era algo habitual.

Solía recorrerme prácticamente todo Getafe junto a mi hermano en lo que llamábamos "la caza" que consistía en visitar la totalidad de quioscos en busca de algún tebeo de superheroes. Aún recuerdo nuestro asombro al encontrar un quiosco, más o menos en el quinto pino, con su vitrina repleta de números de Los Vengadores ¡y a color!. Nada menos que las primeras historias de Stan Lee y Kirby, con el encuentro del bloque de hielo donde permanecía el Capitán América y hasta que se produce el primer cambio de alineación en la serie tras la llegada de Ojo de Halcón... el nirvana. Creo que aquel día perdimos nuestros ahorros de varias semanas. Y mereció la pena.

Luego llegaría Forum, con sus ediciones de "material cronológico e inédito" que a mi me sonaba a chino pero que parecía algo muy importante. Primero cayó, cómo no, Spiderman y luego vendrían La Masa, Los Vengadores y Los 4 Fantásticos. Nunca fui muy de Conan y tendrían que pasar algunos años para que me hiciera con la serie (que por cierto, idiota de mi, vendí en el rastro de Madrid por 500 pesetas).

Tal vez fuera la casualidad pero la editorial Planeta-Forum, tuvo la suerte de empezar sus ediciones en uno de los mejores momentos creativos de Marvel. Spiderman estaba en plena etapa con guiones de Roger Stern y dibujos del primerizo John Romita Jr., La Masa con guiones de Bill Mantlo y dibujos de Sal Buscema, un dibujante que para mí fue el mejor durante muchos años, Los Vengadores nos daban los números de el Conde Nefaria con dibujos de Byrne y luego la saga de Korvak con aquella memorable viñeta en la que el ¿villano? se cargaba a una veintena de Vengadores de un plumazo y en Los 4 Fantásticos leímos la trágica historia de Esfinge.

Eso hizo que desapareciera cualquier atisbo de duda antes de embarcarme en la compra y coleccionismo de cómics Marvel.

Aunque nunca hice ascos a los tebeos de otras editoriales como First, DC o Eagle, lo cierto es que sus ediciones fueron más bien escasas y erráticas y apenas podían competir con los tebeos de Marvel.

Sólo la llegada de la editorial Zinco, publicando el sello DC, me haría ser infiel a mi amada Marvel, abriéndome a todo un nuevo universo de maravillas que hoy en día sigo compaginando con los superheroes de mi infancia.